Ventilación

Ventilar bien reduce el riesgo de alergias y moho en el hogar

ventilar casa

Mantener un hogar bien ventilado no solo aporta frescura, sino que también protege la salud. Diversos estudios confirman que una correcta ventilación reduce la presencia de alérgenos, ácaros y la aparición de moho, principales responsables de problemas respiratorios y alergias.


¿Por qué es importante ventilar?

El aire interior puede llegar a estar hasta cinco veces más contaminado que el exterior. Esto ocurre porque en los espacios cerrados se acumulan partículas de polvo, humedad y compuestos químicos de productos de limpieza o muebles.
Ventilar permite renovar el aire, equilibrar la humedad y eliminar contaminantes invisibles que afectan la calidad del ambiente interior.


Alergias: un problema cada vez más común

El impacto de los ácaros y el polvo

Los ácaros del polvo prosperan en ambientes húmedos y cálidos. Sin una buena ventilación, su número se multiplica, aumentando los síntomas de alergias como estornudos, picor de ojos o congestión nasal.

Polen y alérgenos interiores

Durante la primavera, el polen también puede quedar atrapado en el interior de las viviendas. La ventilación cruzada ayuda a reducir su concentración, evitando reacciones alérgicas.


El moho: enemigo silencioso

El moho se desarrolla en lugares húmedos y mal ventilados, como baños, cocinas o sótanos. Sus esporas pueden causar problemas respiratorios, tos persistente y empeorar enfermedades como el asma.
Ventilar correctamente y controlar la humedad (entre el 40% y el 60%) son medidas esenciales para prevenir su aparición.


Beneficios de ventilar correctamente

  • Mejora la calidad del aire interior.

  • Reduce la concentración de dióxido de carbono.

  • Disminuye la presencia de polvo, ácaros y alérgenos.

  • Previene la formación de moho y malos olores.

  • Favorece el bienestar y la concentración.


Cómo ventilar tu hogar de forma eficaz

1. Ventilación cruzada

Abre ventanas opuestas durante 10 a 15 minutos para generar una corriente de aire que renueve completamente el ambiente.

2. Evita ventilar en horas de alto polen

Si sufres alergias estacionales, evita ventilar a primera hora de la mañana o al atardecer, cuando el polen está más presente.

3. Usa extractores en cocina y baño

Son zonas donde se genera más humedad. Los extractores eliminan vapor y evitan que se condense en paredes o techos.

4. No tapes las rejillas de ventilación

Permiten una renovación continua del aire. Mantenerlas limpias y sin obstrucciones es fundamental.

5. Controla la humedad

Un deshumidificador o un medidor de humedad puede ayudarte a mantener los niveles adecuados para evitar la proliferación de moho.